Hace unas semanas me topé con un término desconocido para mí. Cuando leí la definición, me di cuenta de que en realidad estaba familiarizada con su significado. Este hecho sucede con frecuencia. Es imposible conocer todos los vocablos que existen en un determinado gremio, sobre todo si nunca nos hemos formado en él.
La palabra a la que me refiero, como ya habrás deducido por el título de este artículo, es “tropos”. Me despertó curiosidad y decidí investigar más sobre él.
“Enemies to Lovers”, “Matrimonio de conveniencia”, “El sabio”… estoy segura de que si eres lector, escritor o simplemente te apasiona el cine, habrás escuchado hablar de todos estos términos. Pues bien, todos ellos son tropos narrativos. Y en este artículo voy a profundizar un poco más en su significado y aplicación en el mundo narrativo.
A los lectores nos encanta reconocer patrones en las historias que leemos, ya que nos sentimos identificados con ellos. Esa es la función de los tropos.
Los tropos no solo nos ayudan a identificar y clarificar una historia, sino que también resulta fundamental analizarlos a la hora de realizar una crítica literaria y deben tenerse presente al escribir una reseña. Sin embargo, es importante ser cuidadoso a la hora de escribir una reseña, ya que revelar los tropos utilizados por el autor en la novela podría arruinar la experiencia de aquellos que prefieren descubrir la trama por sí mismos.
Como escritores, el mundo de los tropos puede resultar fascinante. Nos permiten dar originalidad a la historia si sabemos cómo emplearlos. No obstante, debemos tener cuidado de no caer en los clichés, ya que en lugar de enriquecer nuestra obra, estos podrían hacerla repetitiva y predecible.
Es importante diferenciar entre los tropos narrativos y los tropos literarios.
Los tropos narrativos se refieren a los recursos que los escritores utilizan para que los lectores puedan identificar la narración, establecer conexiones emocionales con la historia y los personajes, trasmitir mensajes y dar significado a la trama.
Por otro lado, los tropos literarios son las figuras retóricas que los escritores emplean para embellecer el texto. Se utilizan principalmente en la poesía lírica. Entre ellos se encuentran la metáfora, la hipérbole, la metonimia, la ironía, etc.
En este artículo quiero centrarme exclusivamente en los tropos narrativos, ya que son los que nos interesan a la hora de escribir o leer una novela.
Son numerosos los tropos que podemos encontrar en la literatura. Estos pueden manifestarse en una frase, un personaje o incluso en el tema de la obra. Vamos a explorar algunos de ellos.
Enemies to Lovers (enemigos que se convierten en amantes): Este tropo narra la historia de dos personas que se odian, pero que, debido a ciertos acontecimientos, se ven obligadas a mantener una relación. A medida que se van conociendo, comienza a establecerse una conexión que los lleva a enamorarse. Un ejemplo claro de este tropo lo encontramos en el tercer libro de la serie Twisted, Twisted Hate.
Friends to lovers (Amigos que se convierten en amantes): Al igual que el anterior, este tropo lo solemos encontrar en las novelas románticas. En esta trama los personajes son amigos desde hace tiempo, pero a medida que la historia avanza, uno o ambos comienzan a desarrollar sentimientos románticos. Un ejemplo de este tropo narrativo es Personas que conocemos en vacaciones.
El viaje del héroe: Este tropo solemos encontrarlo en la literatura fantástica. En esta ocasión seguimos el viaje del protagonista, quien es llamado a la aventura. Al principio lo rechaza, pero posteriormente se encuentra con un personaje que le guía y aconseja, lo que lo ayuda a decidirse a embarcarse en la aventura. Es en este punto cuando deberá abandonar su hogar para emprender su misión. Durante su travesía, se encuentra con enemigos y aliados, pero también deberá enfrentarse a distintos desafíos que lo llevarán a cuestionarse a sí mismo. Cada vez que supera un obstáculo y se enfrenta a sus miedos, el héroe experimenta un crecimiento personal. Y una vez completada su misión, regresa a casa. El ejemplo más claro de este tropo es la obra de El señor de los anillos.
El personaje del héroe: Personaje dotado con cualidades que le permiten luchar contra el mal y superar desafíos. Un ejemplo de héroe lo encontramos en Hércules, quien debe luchar contra el rey del inframundo, su tío Hades.
Personaje del villano: Este personaje actúa como antagonista del héroe y su objetivo principal es sembrar el caos y obtener el poder. Voldermort es un claro ejemplo de villano.
Asesinato en un lugar cerrado: Este tropo se refiere a un asesinato que ocurre en un lugar remoto donde los personajes se encuentran atrapados. Lo encontramos en las novelas de detectives. Agatha Christie es la reina de este tipo de novelas, Diez negritos es un ejemplo de ellas.
Los tropos, a diferencia de los clichés, sirven para enriquecer la historia y dotarla de originalidad. Además, como mencioné anteriormente, ayudan al lector a identificar personajes o escenarios.
Por el contrario, los clichés tienen una connotación negativa y podríamos decir que son convenciones que están muy alejadas de la originalidad de los tropos. A diferencia de los tropos que ofrecen originalidad y frescura a la trama, los clichés hacen que la historia sea predecible y, en muchas ocasiones, tediosa de leer.
Si deseas profundizar más en el tema de los tropos, te recomiendo visitar la página web TV Tropes. Se trata de una especie de wikipedia donde se analizan y definen una amplia variedad de tropos narrativos. Sin embargo, es importante tener en cuenta que está en inglés.